Estamos a 3 minutos de las 3 de la mañana. Por no se qué razón me reuso a dormir. Suena Franz Ferdinand. Acabo de ver un programa en Vh1 dedicado a los comienzos del Punk en el Reino Unido. Los Sex Pistols, wow que chabones locos. Encima era locura muy insana. Porque podría haber sido sana como la que aparentaban otras bandas. Remarquemos la palabra APARENTABAN. En fin, lo único que me gusto de los Sex Pistols es que se expresaban, ¡y de que manera!, decian (o mejor dicho gritaban) todo lo que se les cruzaba por la cabeza, sin importar que tan morboso y lastimoso sonara, nada más para que la gente supiera que estaban enojados, con una ira impresionante, contra el poder y la sociedad. Parecía que iban a saltar de la pantalla para golpearte y dejarte en claro quién mandaba. God save the Queen. Hubiera estado tan bueno que Sid Vicious no se hubiera cortado tanto en el escenario, ja. Muchos estimulantes. Me llamaron la atención las letras de los Ramones. En 3 minutos, iban al grano, sin rodeos y ¡Hey Ho Let's Go!. Tenían ese minimalismo que a todos le gustaba. Al mundo le agradaba tanto esa simpleza. Se podía decir que fueron la cuna del Punk, nono su cuna fue Estados Unidos, ellos los padres. ¿Otro icono? Patti Smith. Una mujer. Era poesía con una melodía de fondo, solo eso. Con la tapa de si primer disco rompió el estereotipo de la mujer de la época. Horses everywhere. The Clash nació luego de Sex Pistols. Decían lo que pensaban, tal y como lo hacian los Pistols, pero se notaba el positivismo en sus letras, diversión y esperanza. Miren todo lo que se aprende en una noche de insomnio.